Anillo Miya

Hay joyas que florecen como un secreto compartido. El anillo Miya es una de esas piezas que no solo adornan, sino que despiertan algo dentro.

Hecho a mano en plata pura, su flor grabada no es solo un dibujo, es un latido. Cada pétalo, cada línea, cada espiral en su centro habla de vida, de ciclos, de renacer.

Inspirado en la tradición de las tribus nómadas del sur de Birmania, este anillo lleva consigo la memoria de manos sabias que moldean sin prisas. Que no trabajan con moldes, sino con alma. Cada trazo nace del respeto a la tierra, a las raíces, al tiempo que no corre, sino que acompaña.

El Miya es ajustable y se adapta suavemente al dedo, como si siempre hubiera formado parte de ti. Es cómodo, es ligero, pero sobre todo… es auténtico.

No es solo un anillo. Es una flor que eligió nacer en plata para recordarte lo hermosa que puede ser la sencillez cuando está hecha con amor.